El Comercio Justo se ha desarrollado y ha ido creciendo fundamentalmente por dos productos que son la estrella: el café y el cacao. Del café sabemos que es la segunda bebida más consumida en el mundo y el cacao sigue siendo un producto de masas, ambos además cuentan con una calidad gourmet en todos los productos de Comercio Justo, pese al precio normalmente más alto que en el comercio tradicional, tanto el café como el cacao cuentan con una vitola de calidad extraordinaria que le permiten competir con los productos del comercio clásico.
Pero dentro del Comercio Justo ha aparecido un producto que puede competir no sólo en calidad sino también en precio. Se trata del azúcar de caña integral ecológica, también conocida como Panela. Cada vez más gente por cuestiones de salud está dejando de consumir azúcar blanca refinada que ya de por sí está muy presente en alimentos procesados y bebidas. Las alternativas han dejado de ser los edulcorantes industriales, muy perniciosos para la salud también y apuntan a la panela o incluso a la stevia aunque esta última en menor medida.
Comparando precios del mercado tradicional, ya sea en herbolarios o en grandes superficies, la panela de Comercio Justo es bastante más barata que su homóloga y tiene la misma o incluso superior calidad.
Los distribuidores y vendedores de Comercio Justo deberían de aprovechar esta circunstancia y sobre todo hacer promoción no sólo para mayor beneficio de los productores sino también para ir derribando uno de los grandes sambenitos que acompañan a nuestros productos que es el excesivo precio de los mismos.
