viernes, 28 de junio de 2019

Decálogo del consumidor responsable

1. El consumidor responsable aparte de tener en cuenta la calidad y el precio del producto se asegura de conocer los valores éticos del mismo: relaciones comerciales justas, condiciones de trabajo dignas para los productores, respeto para el medio ambiente y por los derechos humanos.

2. El consumidor responsable se informa de la procedencia de los productos que compra y la historia que hay detrás de ellos.

3. También tiene en cuenta la huella ecológica que deja el producto y consume en consecuencia con la misma.

4. Sólo compra lo que necesita, no se lanza al consumo compulsivo ni se decide por productos supérfluos. Distingue entre las necesidades reales y las creadas por la publicidad. Es un consumidor austero pero eso no quiere decir que sea rácano o miserable.

5. El consumidor responsable tiene claro a qué tipo de comercio quiere favorecer.

6. Se plantea cómo sería para su país el consumo de productos que no fueran legales.

7. Rechaza las bolsas de plástico y los envases que supongan un daño al medio ambiente. Se decide por envases biodegradables o compostables para todos los productos que consume.

8. También rechaza consumir más energía de la que necesita. No derrocha agua ni electricidad, sabiendo que la energía es un bien escaso y su uso desmesurado puede provocar un grave daño al planeta.

9. Busca entidades financieras alternativas como la banca ética o empresas energéticas comprometidas con el medio ambiente. Incluso teléfonos móviles de Fairphone.

10. Sin querer ser proselitista procura hacer campaña en su entorno laboral, familiar o personal para conseguir sensibilizar a más gente acerca de la importancia de consumir responsablemente.


Evidentemente cumplir las diez premisas no está al alcance de todo el mundo y no cumplirlas todas tampoco significaría que una persona sea irresponsable o insolidaria, pero acercarse al máximo a este modelo de consumo responsable nos ayudaría a conseguir un mundo más justo y más sostenible.


lunes, 24 de junio de 2019

Desmontando mitos del Comercio Justo

El Comercio Justo a menudo tiene que saltar escollos excesivamente altos, no sólo ha de enfrentarse a las grandes compañías multinacionales tanto de alimentación como textiles sino que también debe de rendir cuentas al duro escrutinio del consumidor medio y la influencia de determinados estereotipos que viven en el imaginario colectivo.
Uno de ellos es que el Comercio Justo es caro. Eso es directamente falso ya que la calidad de los artículos de WFTO está a la altura de los mejores productos gourmet, además son ecológicos, su equivalente en el comercio tradicional sería mucho más caro. Lo único que hace que el precio se encarezca es que al productor se le paga un salario digno por su trabajo y además hay que contar con la prima del comercio justo que es una cantidad que se le da a los productores con el fin de que inviertan en infraestructuras, sanidad o educación en sus respectivos entornos.
Otro mito falso es que compiten con los productos locales. Los artículos de comercio justo proceden de plantas que en nuestro entorno son imposibles de ser cultivadas, por cuestiones de clima fundamentalmente. El café, el cacao o la panela son productos que tenemos que importar de todas maneras porque aquí no están disponibles. Además suele suceder todo lo contrario, cada vez es más frecuente que las tiendas de comercio justo cuenten con espacios para productos de proximidad procedentes de cooperativas y ecológicos por lo que entre ambos tipos de productos hay una sinergia.
Incluso en el caso del textil, de artesanía o cosméticos pueden ser más baratos los de comercio justo porque no hay intermediarios que encarezcan el precio.

miércoles, 19 de junio de 2019

La historia detrás de cada producto: las cestas de yute

Las cestas son otro de los artículos estrella del comercio justo, se pueden vender sueltas pero en numerosas ocasiones se utilizan para meter productos y venderlas conjuntamente, es un valor añadido para vender lotes de alimentación y/o cosmética y suelen ser un éxito para regalos de empresa sobre todo de cara a las navidades.
Hay mucha variedad de formas, colores y tamaños con una excelente relación calidad-precio pero detrás de estos artículos hay una historia de superación de dificultades y de promoción de personas en situaciones vulnerables.
Por ejemplo aquellas cestas que se elaboran en Bangladesh por parte de la organización de comercio justo BaSe cuentan con la participación de mujeres con discapacidad física, sensorial o psíquica. Dichas mujeres no encontrarían trabajo de ninguna de las maneras en una sociedad que excluye a las personas con cualquier tipo de minusvalía y además cobran el doble del salario mínimo en dicho país lo que les permite ser autónomas y cubrir sus necesidades básicas. Además BaSe también les proporciona recursos sanitarios y educativos. De todas estas iniciativas de comercio justo se benefician más de 10.000 mujeres lo que nos da una idea de cómo se puede cambiar la vida de la gente a través de unas prácticas comerciales justas y que promueven a la persona por encima de cualquier otro interés.
Cáritas cuenta también con una cooperativa en la que se fabrican cestas en Bangladesh y que es conocida como Corr.


martes, 18 de junio de 2019

Nos quedamos sin café

De continuar así la cosa en 2050 los cultivos de café se reducirán a la mitad. El cambio climático está afectando gravemente a la producción cafetera ya que la planta necesita de unas condiciones climáticas muy concretas que se van a dejar de dar por causa del maltrato a la naturaleza por parte de los productores del comercio tradicional.
Cada vez se consume más café en el mundo, el ritmo de vida en gran parte de las sociedades así lo fomenta y las economías emergentes lo van incorporando en su día a día. Por lo tanto es la pescadilla que se muerde la cola: las grandes corporaciones necesitan cada vez más terreno para plantar debido a la gran demanda y se dedican a talar árboles para tener más superficie de cultivo, dicha tala tiene impacto negativo sobre el clima y disminuye la lluvia tan necesaria para que se desarrolle con normalidad la producción de café.
El café de Comercio Justo aparte de ser de la mejor calidad y de respetar los derechos de los trabajadores además de evitar que trabajen niños, sigue una línea de producción totalmente ecológica y de respeto absoluto al medio ambiente. La salida que le queda a esta bebida, la segunda más consumida en el mundo es sin ninguna duda una apuesta por el consumo sostenible, sensato y responsable y eso hoy por hoy sólo puede asegurarlo el Comercio Justo.

Os dejo un enlace de Coordinadora Estatal de Comercio Justo en el que se desarrolla este tema tan preocupante:

http://comerciojusto.org/si-no-se-frena-el-cambio-climatico-la-superficie-destinada-al-cultivo-de-cafe-podria-reducirse-a-la-mitad-en-2050/


lunes, 17 de junio de 2019

NTM de Comercio Justo en Mahón (Menorca)

Los pasados días 13, 14 y 15 de Junio de 2019 se celebró el Nivel Técnico Mixto de Comercio Justo al que asistimos los responsables de dicho programa de las Cáritas Diocesanas de Mérida-Badajoz, Barbastro-Monzón, Kidenda (Bilbao), Lleida, Menorca y Zamora junto con dos compañeras de Servicios Generales de Cáritas Española. 
Conocimos de primera mano los proyectos en los que está inmersa Cáritas Menorca desde hace más de dos décadas y que muestran una excelente salud del Comercio Justo en dicha isla. Cuentan con puntos de venta llamado córners y una tienda en pleno corazón comercial de la ciudad de Mahón que combina la venta de ropa de Moda Re, con muebles elaborados por los participantes de la empresa de inserción y con una planta entera dedicada al Comercio Justo con gran variedad de productos de varias importadoras. 







También visitamos la localidad cercana de Alaior, situada entre Mahón y Ciudadela, donde hay un supermercado que funciona como cooperativa que se llama San Crispín, con muchos productos de proximidad y una estantería entera con variados artículos de Comercio Justo. Todo ello está englobado en un proyecto de economía solidaria llamado Mestral cuyo nombre se debe a uno de los vientos que soplan en la isla de Menorca.
Por lo demás el NTM transcurrió con mucha intensidad y se abordaron múltiples aspectos y temas de gran utilidad para todos que nos permitió enriquecernos mutuamente.
Desde estas líneas quiero agradecer a la gente de Cáritas Diocesana de Menorca, sobre todo a Raquel que fue la anfitriona perfecta, a Guillem que me fue a buscar al aeropuerto y nos llevó a muchos sitios y a Lluna que nos fue a ver y nos dio una gran alegría con su visita . Y también darles las gracias a todos los compañeros y compañeras que participaron en este Nivel Técnico Mixto, fue muy agradable compartir estos días con ellos y aprender de su amplia experiencia.
Moltes Gracies, Menorca, Fins aviat. Enhorabona per la vostra feina!!!





martes, 11 de junio de 2019

El sabor del chocolate

En muchas ocasiones promocionamos el chocolate de comercio justo como un producto que deja buen sabor de boca refiriéndonos al sentido ético y moral. Pero el chocolate de los cultivos de comercio justo, al ser ecológicos y respetar al medio ambiente mantienen todo el aroma que el cacao de esas tierras nos pueden ofrecer.
El chocolate tiene tantos matices de sabor como puede tener el vino, cerca de 300. Para la ciencia es uno de los productos más complejos. Los productores además dejan fermentar el cacao entre dos y siete días, una cuestión crucial para que se desarrollen todos los aromas posibles. Además todo depende tanto del clima del lugar como de la fertilidad del suelo.
El chocolate nos puede traer sabores florales, de avellanas, frutos rojos, cítricos...Todo ello sucede por las prácticas agrícolas ecológicas y ancestrales de los pequeños productores, ésta es una más de las ventajas que tienen los chocolates de Comercio Justo con respecto al resto, algo que no lo dan aromas artificiales añadidos industrialmente, son los propios matices del cacao, dependiendo de la zona, que nos puede hacer viajar a países y entornos tan exóticos como lejanos.
Disfrutaremos por tanto de un chocolate de calidad gourmet que superaría a los del comercio tradicional no sólo en calidad sino también en precio.

jueves, 6 de junio de 2019

Jornada de formación y sensibilización en Villalpando

El miércoles 5 de Junio de 2019 se impartió una charla en los salones parroquiales de Villalpando. Asistieron las personas comprometidas con la Cáritas Parroquial y del movimiento laico vicenciano, de San Vicente de Paúl, además de una religiosa Hija de la Caridad de la comunidad de Benavente. Durante la charla se profundizó en el sentido del consumo responsable como compromiso cristiano y se explicaron en profundidad los diez principios de Comercio Justo además se proyectó el vídeo "El Comercio Justo en 6 pasos" siempre de gran utilidad en este tipo de actuaciones.
La participación fue muy activa por parte de los asistentes y además se pusieron algunos productos de Comercio Justo a disposición de quien quisiera comprarlos y sobre todo para darlos a conocer. 
Se nos emplazó para volver más adelante y hacer extensiva la formación de ayer a más gente de la localidad, abriendo la participación al resto de feligreses y a agrupaciones de Villalpando como la Asociación de Mujeres, concretamente para la semana cultural que se celebrará en la localidad.
Desde estas líneas agradecer a Ángel Carretero, párroco de Villalpando, por su interés en introducir el Comercio Justo allí y por todas las facilidades que nos ha dado, quedando patente una vez más su compromiso con Cáritas.


martes, 4 de junio de 2019

La historia detrás de cada producto: el té

Cada vez más gente decide incorporar el té en su vida diaria, las saludables cualidades de esta hoja y la enorme variedad de sabores y aromas han convertido a este producto en un fijo para las cestas de la compra. Desde Comercio Justo se ofertan muchos tipos de tés: desde infusiones en bolsa hasta la propia planta en hojas, Roiboos, té negro, té verde, té Djardeliing...etc.
Cuando se consume té de Comercio Justo aparte de saborear hojas de primera calidad se ayuda a pequeños productores a los que el Fairtrade les ha mejorado la vida tanto a ellos como a sus hijos.
Los cultivadores de té de Sudáfrica comentan que ahora ganan diez veces más, gracias al Comercio Justo, los grandes granjeros les pagaban lo justo para no tener pérdidas y para apenas subsistir. Ahora pueden incluso mandar a sus hijos a estudiar enseñanzas medias, algo vetado hasta no hace mucho y que redundará en un cambio social importantísimo y en una oportunidad para salir de la pobreza para las siguientes generaciones. Hijos de dichos agricultores pensando en ser contables o policías ahora es posible gracias al Comercio Justo.